Y aquí estamos de nuevo querido diario, contándote cuánto camino he recorrido hoy, y con cuántas piedras he tropezado. Y he tropezado unas cuantas veces, pero eso no debería desanimarme, es lo esperado.

Pero aunque me espere los tropiezos y me levante de nuevo, es difícil para mí mantenerme en alto como antes. En vez de eso, me encorvo un poco más, mi ánimo baja un poco y una vez más las dudas asaltan. Esta vez no es si lo conseguiré o no.

Esta vez, es si estoy yendo por el buen camino. Teoría, teoría y más teoría, no veo la hora de llegar a la práctica y poder curiosear estos mundos. Hasta ahora cada día aprendo algo nuevo, pero tengo la sensación de que la mayoría desaparece de mi mente una vez me meto en el saco y duermo.

Y la teoría hasta ahora es tan parecida... para un libro que empiezo y tiene para practicar un poco y asimilarlo mejor, no tengo a mi compañero de viaje, y el pobre tendrá que descansar por unos días, y no sé cuantos días serán.

Tengo que correr más, correr, correr, tengo que convertir mi cabeza en una esponja y aprovechar todo mejor, no olvidarlo al poco tiempo. Mañana será otro día donde probar otra vez y mejorar mi camino. Espero no equivocarme mucho y estar cerca del buen camino.

Por cierto, en estos mundos hay muchos idiomas, y entre ellos está el español, el inglés, el japonés o chino... Yo el español me lo sé, y practico el inglés a pesar de mis dificultades para ello, ¿sabías que hace falta justificar nivel de inglés para sacar el título de la carrera? ¡A que esperas para ponerte las pilas y practicar otro poco!